Yoga como estilo de vida

Como suelo decir a menudo, el yoga no es solo la práctica de asanas, ni la de meditación, ni la de pranayama… el yoga es todo eso, sí, pero es mucho más. Para entender por qué, después de 5000 años, el yoga sigue tan vivo, hay que ampliar el zoom y verlo como un estilo de vida yogui.

El yoga es un sistema integral que aporta bienestar, autoconocimiento, salud, y crecimiento personal y espiritual. Aborda todas las facetas del ser humano. No se puede simplificar a posturas, ejercicios de concentración o respiraciones… Esa es una parte muy importante, pero no hay que perder de vista otros aspectos igual de significativos y que suceden también fuera de la esterilla.

Más Allá de las Asanas: El Estilo de Vida Yogui

Te contaré una curiosidad : ¿sabías, por ejemplo, que el sistema yoga incluye prácticas de purificación externas e internas? Sí, como limpiarnos correctamente las fosas nasales o movilizar los intestinos para mejorar nuestra salud digestiva. Si no lo sabías, probablemente te acabas de quedar sorprendido, lo sé porque yo también lo estuve cuando me enteré.

El yoga está lleno de detalles como este. Contempla indicaciones y enseñanzas para todos los momentos de la vida. Y no lo hace con la intención de controlar a las personas, sino de liberarlas y hacerlas felices. ¿No es maravilloso?

Adoptando el Estilo de Vida Yogui

Si quieres empezar a integrar el yoga como estilo de vida, tendrás que ir poco a poco pero con paso firme. Sobre todo, con mucha conciencia en cada cosa que haces en tu vida para así poder mejorarla. Y claro, eso requiere entrenamiento y paciencia. Como les digo a mis alumnos, tenemos toda la vida para ir trabajando, no hay prisa.

En la parte del entrenamiento entra en juego la práctica de yama y niyama (código ético del yoga), asanas (posturas), pranayama (ejercicios respiratorios para mobilizar la energía), pratyahara (interiorización), dharana (concentración) y dhyana (meditación). Estas son las herramientas del estilo de vida yogui que irás utilizando día a día para despertar la conciencia y ensayar cómo respirar, moverte, reaccionar… en tu vida cotidiana.

el Trabajo Mental

La paciencia, como muchas otras cualidades, se desarrolla con trabajo mental. La perseverancia, disciplina, desapego, compasión, calma… todas estas virtudes se irán despertando en ti también.

Momentos de relajación, descanso y respeto hacia los tiempos de los demás y los tuyos propios son imprescindibles. La vida moderna nos está enseñando, a través del estrés y la ansiedad, que no podemos ir todo el día a mil por hora; necesitamos encontrar el equilibrio entre actividad y descanso, fundamental para sentir equilibrio, bienestar y paz.

La Alimentación y el Estilo de Vida Yogui

En cuanto a la alimentación, hay mucho que considerar: qué, cuánto, cuándo y cómo comemos. La conciencia sobre la alimentación y hacerla lo más armoniosa posible es fundamental para un yogui o yoguini.

Relaciones y Conciencia en el yoga

Tomar conciencia de cómo nos relacionamos con los demás, con los animales, las plantas, la Tierra como nuestra casa, con el trabajo y con la práctica, pero sobre todo con uno/a mismo/a, es una pieza fundamental del yoga. Cultivar la compasión y el amor (no el romántico, sino el AMOR, así con mayúsculas) y vivir en concordancia con ellos, desde tu corazón, para ti mismo/a y para con los demás, te hace libre.

Cuando integras el yoga como estilo de vida, empiezas a liberarte de miedos, inseguridades, mal humor, malos pensamientos, dolores y sufrimiento, y comienzas a sentir la dicha de Ser. Porque en lo más profundo de tu Ser, eres AMOR y felicidad en estado puro. Solo hay que sacarlos a la luz, y la práctica del yoga aplicada a tu vida te ayudará a conseguirlo. ¡Namaste!

Si te ha picado la curiosidad y lo que te cuento resuena contigo, te invito a unirte al taller «Objetivo: estilo de vida yogui» de manera gratuita. En él te ayudaré a integrar el yoga en tu día a día para que puedas comenzar un viaje transformador hacia una vida más plena, más sana, más conectada contigo mismo/a y más feliz.