Meditación en la gratitud

Quizá no lo habías pensado nunca, pero estar agradecido por las cosas que te pasan en el día a día es una de las claves para tener una vida plena y feliz. Por eso te propongo esta meditación en la gratitud.

Cuando estás agradecido por lo que tienes, lo que te sucede y las personas que te acompañan, dejas de querer más y más. No te estoy invitando a que seas conformista y no tengas ambiciones, sino a revisar todos los detalles de tu vida y a darte cuenta de todas esas cosas, circunstancias y personas son motivos para estar agradecido. Sí te invito frenar el consumismo material, emocional y espiritual en tu vida.

Ahora me dirás…¿y si estoy en una mala racha de mi vida?¿y si las personas que tengo a mi lado no son buenas para mi?… podría seguir con un montón de preguntas por el estilo.

Cuando las circunstancias son favorables es fácil tener un motivo para mostrar gratitud. Si son malas, es más difícil. Hay que hacer entonces un cambio de enfoque.

Las circunstancias o personas negativas en nuestra vida, pueden ser una gran oportunidad para crecer. Nos descubren nuestras fortalezas y nuestros límites, nos dan la oportunidad de re-conocernos, crear nuevas oportunidades, a veces incluso de reinventarnos… Son pues, aunque a priori no lo parezca, momentos también por los que agradecer. «Sólo» hay que ser pacientes y ver que nos deparan.

Además la gratitud nos enfoca hacia lo positivo y nos ayuda a poner en perspectiva lo negativo.

Si te has preguntado alguna vez cuál es el secreto de los optimistas, de los positivos, aquí tienes uno de ellos: agradecer por lo bueno y lo menos bueno que sucede en la vida.

Ser agradecido/a es pues una gran virtud, y merece ponerla en práctica en nuestro día a día. Comienza a dar las gracias por las cosas pequeñas que te suceden y apóyate en la meditación que te propongo hoy.

Te animo a que la practiques y sobretodo, que la disfrutes. Namasté.

Meditación en la gratitud

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